No encontré tu número. El tiempo borró aquel maratón de dígitos de mi memoria. He tenido ganas nostálgicas de saber cómo estás, que ha sido de tus días... qué nuevo
viaje realizaste, cómo va la familia e incluso si ha crecido.
Aun a sabiendas que no entras a este lugar, que tengo casi la certeza que desconoces su existencia tengo la vaga necesidad de que conste, bajo letras, que te he extrañado, quizás poco , tal ves demasiado. Pero no importando la cantidad de la nostalgia, a veces cual vagabundo, los recuerdos felices hacen parada en esta memoria de malas jugadas.
Entonces tú que no leerás estás inconclusas líneas... pero dentro de ti y con todo lo vivido encontrarás que los buenos recuerdos no mueren pese a la cantidad de días que hayan transcurrido o a pesar de los sabores amargos... ellos viven en esa parte de nuestro cerebro o alma donde se guardan exclusivamente los tesoros y regresan a saludarnos aun cuando no se evoquen.
Hoy, como tantos días, te he vuelto a extrañar.
1 comentario:
Hola me gustó tu blog, paseré mas seguido.
Hoy estoy extrañando a alguien de solo pensar que ya no va a estar, me siento medio nostalgica hoy
Besos
Publicar un comentario