martes, 18 de diciembre de 2007

Memoria

Te extrañé...

Recordando las imágenes de atardeceres rojos, me vi buscando los buenos momentos de todo aquel sueno vivido mil veces.

Hoy, luego de tantos años, tu recuerdo se hizo tan presente que casi pude sentir el sonido de tu voz.


Gracias por todo lo aprendido...

Los recuerdos a veces te arrancan sonrisas, lágrimas, te trasladan a lugares... o incluso vives todo lo antes mencionado.

Hoy, sin saber cómo te vuelvo a dedicar pensamientos, letras, líneas, recuerdos y espacio.

Entonces le sonríes al recuerdo y él sintiéndose vivo vuelve a dormir.

Dios te bendiga, doquiera que estés.

3 comentarios:

Reivajss dijo...

heyyy...
ese es un post muy lindo :)
a veces he tenido esa sensación... si te metes mucho, pues te arranca todos los sentimientos mezclados con melancolía... no muchas personas pueden causar esas sensaciones..

Saludos Hadita

Siluz dijo...

El tiempo actúa como un filtro en nuestra memoria. Y esos recuerdos que logran pasar es porque han sido significativos en nuestras vidas, para bien o para mal. Lindo cuando se recuerda con cariño y nostalgia.
Dios te bendiga, Cabita. Y felicidades en esta Navidad.

Loretto González Díaz dijo...

hay que reconciliarse con los recuerdos... a diario.
Atenta a tus nuevos vuelos, desde Chile te saludo siempre en Con Tacto.